Una de las azafatas de la aerolínea británica Virgin Atlantic se conmocionó con la tierna historia que vivió en uno de sus vuelos, con destino a Nueva York: un joven, que viajaba junto a su familia, cambió sus asiento en primera clase por uno de turista a una mujer de 88 años para que esta "cumpliera su sueño".
Nadie se lo pidió. Simplemente, ambos pasajeros, Jack y Violet, se conocieron por casualidad en la fila de embarque y comenzaron a hablar. Ella le expresó el deseo de saber "cómo era viajar en esa parte del avión". Cuando él supo de la curiosidad que la mujer sentía por disfrutar de las comodidades de primera clase el joven no dudó en ofrecerle el cambio desinteresadamente. De esta manera, Jack pasó de ser uno de los pasajeros 'prioritarios' a sentarse al lado de los baños. Algo que no le importó en absoluto, informa Fox News.
Leah Amy, la azafata, detalló que la octogenaria viaja con frecuencia a Nueva York para visitar a su hija, aunque hacía tiempo que no podía realizar el trayecto debido a una operación de rodilla a la que recientemente tuvo que someterse.
La auxiliar de vuelo quiso dar a conocer la historia de "sus pasajeros favoritos" y la compartió en Facebook, junto a varias fotos de ambos pasajeros y otros miembros de la tripulación. "Deberían haber visto su cara, cuando la metí en su cama después de la cena. Dijo que su hija no le creería y que quería una "selfie" para probarlo", escribió Amy. Cientos de usuarios de la red social alabaron el emotivo gesto del joven.
